Recientemente hemos tenido muchas noticias de Microsoft referentes a sus consolas que ciertamente no son muy positivas, sin embargo vale la pena analizar cada una de estas acciones.
Para empezar anunció el cese de la producción de modelos Xbox One S All-Digital Edition y Xbox One X; se especula que esto puede deberse al rumoreado lanzamiento del Xbox Series S que ofrecería un rendimiento mejor que el del Xbox One X a un precio menor.
De ser cierto no habría lógica que siguieran produciéndose un modelo inferior en cuanto a sus capacidades técnicas y a mayor costo.
El pero en la sopa (falta confirmar) es que también se rumorea fuertemente que el modelo Xbox Series S, no tendría unidad para leer discos (lo que también explicaría que se dejara de producir el modelo Xbox One S All-Digital Edition).
Cabe la pena destacar tanto el Xbox One S All-Digital Edition y el Xbox One X, seguirán a la venta hasta que se agoten las unidades ya fabricadas.
También Microsoft anunció que no todos los juegos de Xbox One serán retrocompatibles con Xbox Series X, ya que al no contar con puerto para conectar un Kinect, los juegos que lo requirieran no podrían ser usados en la nueva consola de Microsoft.